EL GLOBAL
Es habitual asistir en España a una guerra dialéctica entre Administraciones y sector farmacéutico (en especial la industria del ramo) respecto a los ratios de penetración en el mercado nacional del medicamento genérico. Según la forma en la que se echen las ‘cuentas’, la tasa de penetración del EFG puede situarse por encima (Administración) o por debajo (sector) del 40 por ciento. Más imposible aún es conocer los datos reales de dispensación de genéricos en cada oficina de farmacia.
En cambio, en países vecinos como Portugal sí existen herramientas para ello. Su agencia Infarmed (equivalente a la Agencia Española del Medicamento) publica y actualiza los datos de dispensación de EFG en cada una de las oficinas de farmacia que confirman la red nacional. Así, puede saberse que la ‘Farmacia República’, ubicada en Lisboa, lidera el ránking con un 68 por ciento de dispensaciones genéricas sobre su total, seguida de la ‘Farmacia Alegrete’ de Portalegre (64 por ciento). Según este listado, casi la mitad de sus boticas presenta cifras de dispensación de EFG iguales o superiores al 50 por ciento.
En estas cifras mucho tiene que ver la apuesta del gobierno luso por los EFG, traducida en medidas como los incentivos a las farmacias por dispensarlos a partir de 2017, por lo cual recibirán una retribución ‘extra’ de 0,35 por envase. Una medida que se añade a la política de financiación de un precio máximo (siendo el paciente el que abona el diferencial), lo que favorece la entrega de genéricos.
El II Foro hispano-luso, en camino
En este sentido, próximamente la farmacia española tendrá una oportunidad de comparar modelos con la próxima celebración de la segunda edición del Foro Hispano-Luso de la Farmacia. Precisamente, una de las conclusiones del primer encuentro celebrado el pasado 10 de mayo en Madrid fue la necesidad de implantar medidas estructurales en España que potencien al genérico, frente a las actuales políticas difusas en torno a él.