DIARIOFARMA
El gasto en productos sanitarios sin receta crece a un ritmo que, en los dos últimos años, duplica al incremento registrado tanto en medicamentos hospitalarios como en la venta a través de receta médica en las oficinas de farmacia, según los datos que recopila de forma mensual el Ministerio de Hacienda.
La evolución de los últimos doce meses de los que hay datos completos, que comprende el periodo entre julio de 2016 y junio de 2017, comparado con los doce meses anteriores arroja un crecimiento de los productos sanitarios sin receta que asciende al 3,4%. Esta cifra contrasta con el decrecimiento que se puede observar en los medicamentos hospitalarios en un 7,3%, circunstancia que viene siendo habitual a consecuencia de la reducción de utilización de los medicamentos antivirales de acción directa para la hepatitis C.
Si miramos aún más atrás, al periodo anualizado anterior, que va entre julio de 2015 y junio de 2016 frente a julio de 2014 y junio de 2015, se observa que en este caso los medicamentos hospitalarios crecieron de forma considerable, hasta el 13,7%, al igual que los productos sanitarios, que lo hicieron en un 7,3%. De este modo, al comparar los últimos doce meses con el periodo julio 2014 a junio 2015, podemos observar que el crecimiento de los productos sanitarios (11,0%) duplica al de los medicamentos hospitalarios (5,4%). Incluso si se compara con las ventas a través de receta médica, los productos sanitarios sin receta casi les duplican, ya que las ventas en oficina de farmacia han crecido, según los datos de Hacienda, un 6,1% en los el último año, comparado con el periodo de doce meses de dos años atrás.
Cabe señalar que estos productos sanitarios sin receta, están definidos como aquéllos comprendidos en las letras a) a e) del apartado 1 del artículo 2 del Real Decreto 1591/2009, por el que se regulan los productos sanitarios y consisten, entre otros en los instrumento, dispositivo, equipo, programa informático, material u otro artículo, utilizado solo o en combinación, incluidos los programas informáticos destinados por su fabricante a finalidades específicas de diagnóstico y/o terapia y que intervengan en su buen funcionamiento, destinado por el fabricante a ser utilizado en seres humanos con fines de Diagnóstico, prevención, control, tratamiento o alivio de una enfermedad, una lesión o deficiencia o en investigación, sustitución o modificación de la anatomía o de un proceso fisiológico, así como en la regulación de la concepción. Igualmente, los productos dirigidos al diagnóstico in vitro o los considerados ‘producto a medida’ estarían incorporados dentro de este apartado de productos sanitarios sin receta.
Doce meses de caídas
Si nos fijamos exclusivamente en lo que ha ocurrido con los medicamentos hospitalarios, se puede observar que en la evolución de la tasa interanual se han acumulado ya doce meses de caídas. En el último mes disponible, junio de 2017, el gasto acumulado (enero a junio) se ha contraído en un 1,1%. Esta circunstancia se da, en mayor o menor medida en doce comunidades autónomas, mientras que en las dos Castillas, Galicia, Madrid y País Vasco, el gasto ha repuntado en los primeros seis meses de año, comparado con el mismo periodo de 2016.
En términos monetarios, durante los primeros seis meses de año el gasto en medicamentos hospitalarios ha alcanzado los 3.066 millones de euros. De ellos, 144 millones corresponden con tratamientos para la hepatitis C, cifra que queda por debajo de la mitad de la inversión realizada en hepatitis C entre enero y junio de 2016: 316 millones de euros.
Lo que parece que se ha estabilizado en un fifty-fifty es el reparto de gasto en oficina de farmacia y hospital. Según los datos de los últimos doce meses, la suma de medicamentos hospitalario y de productos sanitario sin receta, alcanzan la cifra de 10.428 millones de euros, mientras que el gasto a través de receta médica, de dispensación en oficina de farmacia, asciende a 10.277 millones de euros. De este modo, el hospital es responsable del 50,29% de los 20.705 millones de gasto total en medicamentos y productos sanitarios, mientras que la farmacia factura el 49,71% del mismo.
Durante unos meses en los que el gasto farmacéutico hospitalario alcanzó máximos históricos a consecuencia de la hepatitis C, el porcentaje superó el 52-48 durante cuatro meses y llegó a alcanzar un 52,32% en hospital en el periodo marzo 2015 a febrero de 2016.
Finalmente, en lo que se refiere a la evolución del gasto en medicamentos y productos sanitarios en todos los lugares de dispensación, cabe señalar que en los últimos doce meses se ha registrado una contracción mínima del 0,1%, al crecer prácticamente lo mismo en oficina de farmacia que lo que se decrece de forma global en el hospital.