El Estado y las comunidades autónomas se enfrentan al año más complicado de la legislatura. El objetivo general continuará siendo el mismo de los últimos ejercicios: seguir prestando los servicios sin sobrepasar los objetivos de déficit...
http://www.elglobal.net/noticias-medicamento/2014-08-29/politica-sanitaria/llega-un-curso-marcado-por-las-elecciones-del-ano-2015/pagina.aspx?idart=854766
El Estado y las comunidades autónomas se enfrentan al año más complicado de la legislatura. El objetivo general continuará siendo el mismo de los últimos ejercicios: seguir prestando los servicios sin sobrepasar los objetivos de déficit. El reto, sin embargo, es hacerlo sin medidas que puedan afectar a los resultados de las elecciones municipales y autonómicas de mayo 2015, y consecuentemente a los de las generales de finales de año, una situación que afectará sobre todo a las políticas más sensibles de cara a la ciudadanía, principalmente Sanidad, Educación y Servicios Sociales, y que son precisamente las que más dificultades presentan de cara a su sostenibilidad.
Desde este punto de vista es comprensible lo ocurrido en el Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF) que tuvo lugar el 31 de julio. La necesidad pudo haber llevado al Ministerio de Hacienda a solicitar a las comunidades autónomas fórmulas para seguir ajustando el gasto público, pero nadie parece creer que sea el momento de abordar ninguna de las 255 medidas de racionalización recopiladas a tal efecto, muchos de ellas adscritas al ámbito sanitario. La necesidad dirá, también, si el Ministerio de Hacienda y las comunidades lo retoman en lo que queda de legislatura.
La situación se complica para las comunidades, que deberán diseñar los presupuestos de 2015 sin disponer de un nuevo sistema de financiación. Algunas de ellas ya han comenzado a alertar de sus necesidades en materia de Sanidad. Nada más finalizar el CPFF de julio, el consejero de Economía de la Generalitat, Andreu Mas-Colell, aseguró que el Ministerio de Hacienda no va a incrementar el dinero destinado a Cataluña (ni a ninguna otra comunidad) el próximo año, lo que, al reducirse los ingresos, supone pedir a Cataluña que recorte en sanidad y educación. Más recientemente, Alberto Fabra, presidente de la Generalitat Valenciana, ha retomado la batalla por la financiación cifrando en 1.000 millones de euros las necesidades de la comunidad en Sanidad y Educación, una cuantía que a su juicio el Estado debe afrontar "sin demora". También la consejera de Sanidad de Canarias, Brígida Mendoza, cuantificó en 2.400 los millones de euros que el Gobierno Central adeuda a las islas en virtud en financiación sanitaria.
Las quejas de estas comunidades autónomas tienen un trasfondo mayor. Si bien Cataluña y la Comunidad Valenciana ya han demostrado sufrir problemas de impagos a sus farmacias, el problema para Canarias puede estar a punto de aparecer. La portavoz en materia de Sanidad del grupo Popular en el Parlamento canario, Mercedes Roldós, ha advertido de que a partir de septiembre el Gobierno regional puede dejar de pagar las facturas que debe a los farmacéuticos del archipiélago, puesto que se acaba el presupuesto para este fin. De confirmarse, sería el cuarto año consecutivo en el cual los créditos asignados por el Gobierno de Canarias en fármacos de receta se agotan a principios de otoño. En los últimos días, el propio Gobierno de Canarias ha reconocido que se verá obligado a negociar con las farmacias las facturas a partir de octubre.
La entrada en vigor de la orden de precios de referencia ayudará a las autonomías a contener el gasto en farmacia, pero el objetivo en los próximos meses podría centrarse en la factura hospitalaria. En línea con el mensaje trasladado desde la Comisión Europea, que en su valoración del Plan Nacional de Reformas recomendó a España contener gastos por esta vía, comunidades como Murcia o Galicia han anunciado ya que tienen pensado poner el foco en este asunto. El reto, aquí, es hacerlo al tiempo que se garantiza la entrada de medicamentos innovadores al sistema.
Pisar el acelerador
La proximidad de las elecciones también afectará a las políticas del Ministerio de Sanidad, que se verá obligado a pisar el acelerador para sacar adelante los asuntos pendientes de la reforma sanitaria. En el ámbito farmacéutico, el equipo de Ana Mato tiene pendientes dos asuntos que han marcado la actualidad de los últimos meses: por un lado, el desarrollo de la Ley de Garantías en relación a los medicamentos biológicos. La vía escogida podría ser el Real Decreto de Precios, que el sector lleva meses esperando.
No son los únicos. También se está a la espera de la orden ministerial para regular los homeopáticos o la interoperabilidad de la receta electrónica, prevista para el año 2015. La reforma sanitaria también tiene otra gran asignatura pendiente: la puesta en marcha del Fondo de Garantía Asistencial, el FOGA, una herramienta de gran valor de cara a las comunidades autónomas, que siguen echando en falta el mecanismo de compensación por la asistencia a pacientes desplazados de otras regiones. Complejidades técnicas obligaron a retrasar su puesta en marcha hasta finales de 2013, pero el retraso acumula ya ocho meses más.
Fuera del Ministerio de Sanidad, sigue pendiente la creación de la Agencia Estatal de Investigación. El retraso que acumula le ha valido al Gobierno varios rapapolvos por parte de Bruselas. Las prioridades en el congresoAsuntos sanitarios sin la comparecencia de Mato. Al inicio del nuevo curso, los asuntos se le acumulan a la ministra de Sanidad en el Congreso. La llegada del verano dejó pendientes la financiación de los tratamientos para la Hepatitis C (sobre la cual PSOE e IU presentaron sendas PNL) y el futuro de la vacuna de la varicela. En teoría, en el primer Pleno del año, previsto para el 9 de septiembre, debería tener lugar la moción consecuencia de interpelación de CiU sobre este tema. Aunque no están del todo cerrados, los calendarios de trabajo de los grupos de la oposición no han variado mucho. Sus máximos responsables anuncian que seguirán trabajando en la universalización de la sanidad; un nuevo modelo de financiación sanitaria o una nueva estrategia para la incorporación e innovaciones terapéuticas. La gran novedad es el ébola, aunque los grupos se quedarán con las ganas de hablar con la ministra sobre ello. En la reunión de la Diputación Permanente celebrada la semana pasada, el PP no se mostró partidario de que Mato comparezca para hablar de este asunto, ni de la hepatitis C o la violencia de género.