EL GLOBAL
El Principado de Asturias se ha incorporado ya a la receta electrónica interoperable, que permite la dispensación de fármacos entre comunidades autónomas. Con este modelo, los usuarios del sistema sanitario asturiano podrán recoger su medicación en las farmacias de otras regiones que también lo hayan implantado. De esa forma, cualquier persona desplazada fuera del Principado y que precise de algún tratamiento prescrito en su centro de salud mediante receta electrónica podrá recogerlo en cualquier farmacia del territorio en que se encuentre, siempre que cuente también con este servicio. La Consejería de Sanidad ha realizado a lo largo de este año, yen colaboración con el Colegio Oficial de Farmacéuticos, diversas adaptaciones tecnológicas para responder a las exigencias establecidas por el Ministerio de Sanidad en la implantación de esta aplicación.
Con la inclusión de Asturias, son ya de diez CC.AA las incluidas en este proyecto(Aragón, Canarias, Castilla-La Mancha, Castilla y León, Extremadura, Galicia, La Rioja, Navarra y la Comunidad Valenciana). Esto permite que prácticamente10.000 oficinas de farmacia sean interoperables (9.923, en concreto, sumando las 455 existentes en el Principado), si bien todavía por debajo de la mitad de la red nacional formada por 21.968 establecimientos (solo un 45 por ciento). Respecto a los pacientes, tan solo cerca del 40 por ciento de españoles tiene la posibilidad actualmente de retirar su medicación prescrita electrónicamente en alguna región —si bien no todas— distinta a su lugar de residencia, como puso de manifiesto un reciente análisis de este periódico.
Cabe recordar que el cronograma deeste proyecto de interoperabilidad de e-receta del SNS presenta un sistemático retrasorespecto a las previsiones del Ministerio de Sanidad y que, tras incumplimientos pasados, ahora pasaban por lograr la plena interoperabilidad en este 2017 o principios de 2018. Unos vaticinios que, al menos respecto a 2017, serán imposibles de cumplir, ya en plena ‘despedida’ de ejercicio.
Tras la incorporación de Asturias, la próxima región en unirse a la interoperabilidad podría ser País Vasco.Su consejero de Sanidad, Jon Darpon, ya ha anunciado que los pacientes de esta autonomía podrán retirar su medicación en otras CC.AA a partir del primer trimestre de 2018. No obstante, los expertos siguen recordando que la verdadera prueba de fuego de este sistema tendrá lugar cuando entren a formar parte de él las ‘grandes’ regiones —por cifra de habitantes y red de farmacias— como Comunidad de Madrid, Cataluña y Andalucía.